10 Consejos Legales Para Tu Negocio

07 Ago 10 Consejos Legales Para Tu Negocio

Por: Mario Lomeli Ibarra

Al iniciar un negocio, muchos empresarios siempre se toparán con muchas sorpresas, pero una demanda no debería de ser una. A continuación, te proporcionamos 10 consejos para la protección de la estructura corporativa de tu negocio:

1. Asociarse únicamente con gente que conozcas bien.

Como dicen: “Si quieres perder a un amigo, hazlo tu socio”. Muchos negocios exitosos han surgido primero de una gran amistad, la cual los convierte en socios al iniciar un negocio, ya que existe la lealtad y la confianza. El problema surge cuando se atraviesa el dinero y los intereses comerciales. Es por eso, que es muy importante asociarse e iniciar un negocio con gente que compartan los mismos valores, ideologías, metas y visión, de tal manera que sean todos complementarios.

No solo es importante un socio que aporte la misma cantidad de dinero al proyecto, sino que también tenga cierta experiencia, preparación profesional, y sobre todo, compromiso emprendedor. Esta también es una recomendación que hacemos a nuestros clientes que están franquiciando, ya que es importante conocer al franquiciante para asegurarse que comparten las mismas ideas que van a hacer que la franquicia tenga el éxito deseado.

Una vez asociados, es importante que por lo menos se firme un contrato de asociación en participación, ya que en caso de cualquier controversia, los derechos y obligaciones de cada socio quedarán protegidos.

2. Siempre trabajar con socios con un contrato detallado.

De todos, éste es el problema más sencillo de evitar y a la larga no sólo evitarán enemistades, sino que será un respaldo en caso de que la empresa sufra algún desbalance. Muchos emprendedores dejan a un lado los contratos porque consideran que lo mejor es enfocarse desde un inicio en la operación de un negocio, sin embargo, el postergarlos puede traer graves consecuencias, independientemente de la confianza que se tenga en los socios. Siempre se debe contemplar un contrato que englobe todos los detalles e incluso los puntos más sensibles como la propiedad industrial, operaciones, responsabilidades y en caso de encontrar puntos de vista opuesto definir desde un principio cuál será la dirección de la empresa.

En este sentido, entre más rápido se establezcan las responsabilidades dentro del negocio, incluso antes de emprenderlo, mejor será para el entendimiento de todos los involucrados, además es junto antes de iniciar operaciones cuando los emprendedores se encuentran más animados

3. Nunca asociarse con una participación de 50-50 entre los socios.

Aunque ésta sería la manera más lógica y equitativa de establecerse, a largo plazo, cuando los problemas comiencen a surgir, o se contemple la posibilidad de que ingrese un nuevo socio, debe ser alguno de los dos quien tenga la decisión ejecutiva, es decir, que en él recaerá la responsabilidad de que una discusión sobre este tema se zanje, sin necesidad de llegar a un empate y que al final de cuentas conlleve a un callejón sin salida a menos que uno de los socios compre o adquiera las acciones del otro socio.

4. Elegir el régimen jurídico correcto.

Para evitar cualquier tipo de problema fiscal, se debe contemplar de entrada la forma en la que reconstituirá la empresa, si a través de una persona física o moral, cada una tiene características propias y evitan que por una mala decisión, se ponga en riesgo el negocio además de acarrear problemas fiscales que lo perseguirán incluso si su proyecto fracasa. Muchos negocios deciden constituirse para proteger los bienes personales, y de esa manera, mantener separados los activos de sus socios para protegerse en caso de una demanda. Por otro lado, hay muchas ventajas para un negocio que se constituye, como lo son la capacidad de obtención de créditos, credibilidad antes sus clientes y proveedores, entre otros.

Es recomendable constituirse al iniciar un negocio nuevo, esto brinda una estructura más compleja ante los ojos de los clientes, los bancos y los inversionistas, demuestra que el negocio es serio, y con la intención de operar a largo plazo.

5. Contar con los contratos esenciales.

Dentro de el proceso de planeación de las empresas, es indispensable incluir la protección legal que sólo un contrato puede otorgar.

Aunque se puede ver como un gasto, es sabio verlo como una inversión, puesto que representa un ahorro significativo al evitar llevar a juicio cualquier problema legal, el cual representaría 300% más de lo que costaría si se tienen los contratos necesarios.

6. Nunca hacer acuerdos verbales con clientes y proveedores.

Uno de los errores frecuentes y que pueden llevar a la bancarrota a muchos, es dar por sentado que todos los clientes y proveedores cumplirán con sus pagos o cobros que fueron establecidos de manera verbal para ello.

Es importante establecer las transacciones de negocios por escrito, y no asumir ciegamente que todo saldrá según lo planeado.

Cuando las cosas van mal, el empresario y el cliente o proveedor suelen tener ideas diferentes y no cumplir con lo establecido por medio de la palabra, por eso es mejor realizar no sólo un contrato por escrito, sino elaborar uno específicamente para cada una de las relaciones de negocio, evitar sobre todo los machotes y mejor redactar uno que este de acuerdo a su empresa.

7. Registrar marcas, slogans y obras de autor.

La propiedad intelectual es lo más valioso que tiene tu negocio. Es el producto de mucho esfuerzo tanto de todo el concepto del negocio, como de estrategias para posicionar el negocio, y por no darle prioridad a unos de los primeros pasos que se deben de tomar en cuenta antes de ofrecer tus productos y/o servicios.

Además de protegerte de que otro negocio no copie tus ideas y tu identidad, registrar todo tu material intelectual te da la ventaja de otorgar licencias, cobrar regalías, ceder tus derechos, y sobre todo, cumplir con uno de los requisitos principales al momento de franquiciar.

8. Asegurar la confidencialidad en los negocios.

Se trata uno de los aspectos más delicados de una empresa, puesto que si no se cuenta con la protección y los contratos necesarios para procurarla, se pone en riesgo la integridad y patrimonio del negocio.

La información es poder, y emprendemos en un mundo de negocios en donde la comunicación es instantánea, y de tal manera, en segundos se puede comprometer todos los secretos industriales que hacen que la empresa tenga una ventaja competitiva sobre otras de giro similar.

9. Leer las letras chiquitas antes de firmar.

Por lo regular, nunca leemos los contratos de adhesión al momento de firmar un compromiso, en especial, cuando hacemos una transacción por internet, por lo cual, es importante que no sólo sea preste atención a todo lo que se firme en nombre de la sociedad, sino también, proteger a sus clientes por medio de contratos claros y fáciles de entender.

10. Consultar a un abogado especialista.

Los abogados no somos todólogos. Más bien, somos como los doctores: Especialistas. Cuando nos duele una muela, no vamos con un cardiólogo. Es por eso que existimos abogados corporativos, quienes son especialistas en todas las cuestiones legales de las empresas.

Como mínimo, un abogado corporativo debe de revisar lo siguiente:

– Análisis de la vigencia de permisos y registros gubernamentales, tales como: Operación, Marcas, Inversión Extranjera, etc.

– Verificación de contratos de asociación, constitución de sociedades, actas de asamblea, poderes, etc.

– Análisis de litigios y trámites administrativos en curso.

Muchos ven a un abogado como un gasto, mientras que un abogado, en especial uno especializado en negocios, puede ser unos de los activos más valiosos de una empresa.

Es inevitable llegar a un juicio, o pensar que nunca vamos a llegar, pero sí es importante que cuando llegues, llegues preparado de la mejor manera con todos tus documentos en orden.

La mejor manera de conocer la situación legal de tu empresa, es por medio de un diagnóstico legal, el cual es elaborado en todas las áreas en las que se desenvuelve tu negocio, y este mismo te brinda un resumen en el que te arroja resultados como: ¿Qué estás haciendo bien?, ¿Qué estás haciendo mal?, o ¿Qué opciones para mejorar?.

Que no te pase como cuando vamos al doctor, que llegamos con ellos cuando ya tenemos el problema encima. Prepárate y haz que tu negocio crezca de manera correcta y segura.

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